Un signo muy frecuente de la primavera son los sonidos de los pájaros, que por fin comienzan su segunda vida después de un invierno largo y muy frío, porque para las aves en particular el invierno es una época muy difícil y dura de vivir. En invierno todo está cubierto por una capa blanca de nieve, por lo que es muy difícil para estas aves encontrar comida.