Una langosta se pasea por un fondo rocoso y se pregunta qué va a comer hoy. Está vacío a su alrededor, ni un solo gusano, si se va a dormir con el estómago vacío habrá un gran escándalo. Busco al pobre y no encuentro nada, así que vuelve a su casa, quizás tenga algo más en su madriguera. Dibuja a nuestra hambrienta langosta un supergusano por si resulta que no hay nada en su madriguera.