Existe la tradición de que cuando dos personas se quieren mucho y atan su futuro el uno al otro aparece un pequeño anillo de compromiso. La mayoría de las veces es el caballero quien propone matrimonio a la dama. Compra un anillo que exprese su amor. Elige el lugar y el momento adecuados, se arrodilla y pregunta a su elegida "¿quieres casarte conmigo?". Es un momento maravilloso. Pinta el anillo del color que quieras.