Los delfines son muy hermosos y también inteligentes. Curiosamente, no son perezosos, sino que les encanta hacer la siesta durante el día y descansar. A veces, puede parecer que son malos porque tienen mucho carácter. Les encanta jugar y su compañía. Se comunican mediante el habla y los gestos. Aunque son dóciles, tienen sus enemigos, las orcas más grandes que la vida.