Echa un vistazo a este dulce zorro. Tiene pequeñas orejas triangulares y una cola muy larga. Te está agitando las patas y te pide que lo colorees. ¿Te dejarás invitar por el zorro para jugar juntos? Si es así, corre a por tu estuche y saca los lápices de colores. Comienza a colorear el dibujo llenando todo el fondo de color.